Los restos del café y del desayuno en general suelen ser un auténtico tesoro para fertilizar las plantas, ya sean ornamentales o comestibles. Si por un lado las pieles de las frutas son ideales para hacer compostaje, el café no se queda atrás. De hecho, además de poder añadirlo a la pila del compost, admiten otras muchas maneras de convertirse en un abono.
Podríamos decir que el abono es ecológico, y en cierto modo lo sería, pues el uso de los restos del café para las plantas supone reciclar un alimento, si bien este habría de ser orgánico para considerarlo realmente ecológico a la hora de abonar un huerto que a su vez fuese orgánico.
Pero… cómo podemos aprovechar los restos del café para las plantas?
A continuación veremos distintas maneras de aprovechar los restos del café para alimentar nuestras plantas o para utilizarlo como pesticida natural, entre otros usos que nos ayuden a practicar una jardinería más sostenible.
Como primera medida, antes de hacer un repaso a los distintos modos de sacarle partido a los residuos del café, conviene tener en cuenta un consejo práctico que es clave para su conservación. Y es que a la hora de almacenar los residuos, ya lo hagamos en una bolsa de plástico o en un envase de cristal, tupper o similares, es fundamental que estos estén secos, pues de otro modo la humedad puede provocar que se pudran. Sobre todo, si tardamos en utilizarlos.
Otra cosa distinta es sacarles partido echándolos a la pila del compostaje, en cuyo caso podemos añadirlos tal cual, secos o húmedos, teniendo en cuenta que suelen conformarse añadiendo capas de materiales frescos y húmedos que se alternan con otras capas de materiales secos.
Así, ya sea como fertilizante orgánico mezclado con la tierra, como alimento para las lombrices del compost, para formar compostaje tradicional o como ahuyentador de bichitos del jardín, el café tiene diferentes utilidades en el jardín, entre ellas las siguientes:
Los restos de café tienen principalmente dos funciones al añadirlos al compost para la tierra de nuestro jardín, huerto o plantas en maceta:
- Enriquece la tierra: abonar con compost regularmente mezclándo el café con la tierra y el mantillo vegetal puede reducir la necesidad de abono convencional, e incluso hacerlo innecesario. También es efectivo echar directamente los restos del café alrededor de las plantas, junto con el mantillo, tanto en macetas como en jardines superficies más amplias. El resultado será un fertilizante que funciona como cualquier otro abono orgánico, que no acidifica la tierra en exceso, más bien es algo alcalina. Para hacer fertilizante líquido, solo tendrás que mezclarlo con agua y dejarlo reposar durante toda la noche. Obtendremos un fertilizante líquido que podemos aplicar a modo de riego o aplicándolo directamente en tallos y hojas.
- Nitrogenar la tierra: aunque el abono de nitrógeno alude a un elemento químico, a menos así lo es si atendemos a su definición convencional, también es cierto que el café que tomamos deriva de semillas procesadas, con lo que los restos de café son ricos en nitrógeno. Su proporción de en torno al diez por ciento es idónea para enriquecer la tierra con nitrógeno, que será de gran ayuda para el crecimiento de las plantas, su floración y, en caso de tener una huerta, también para sus frutos.
Así, el café puede ser añadido al compost, los restos de café son una fuente de nitrógeno por eso son de color marrón y es considerado un material de compostaje verde y es ideal para añadir con restos de plantas y hierbas cortadas. Compostar de forma activa es necesario, la mayoría de los expertos recomiendan este material con un poco de café. Debes saber que tus restos de café no deberán comprender nunca más del 20% de compost porque podría tener entonces, un impacto negativo.
Si quieres, también puedes añadir café molido para tu compost para comprobar si va bien o no a tus plantas. Aunque claro, éste remedio podría salirte demasiado caro ya que el café no es barato, pero es algo que puedes intentar.
Ahuyentar gusanos, caracoles y babosas
Una capa fina de café molido o de restos de café puede ayudar a mejorar el suelo de tu jardín, pero además la composición natural del café se combina para hacer de barrera para las babosas, ya que no será fácil para una babosa, gusano o caracol desplazarse sobre una superficie de café molido. Resulta efectivo colocarlo formando un círculo alrededor de la planta.
Si tienes problemas de babosas en tu jardín, el café molido como ves será tu gran aliado porque, además, la cafeína es tóxica para las babosas por lo que no intentarán acercarse a tus plantas ni a tu hogar. Puedes utilizar café molido para ponerlo alrededor de tus plantas. Pero te aconsejamos que no utilices una capa espesa de los posos de café porque se podrían compactar y crear una corteza sólida que no permitiría que el aire o el agua entrase a las raíces para que la planta viva. Lo ideal es utilizar una fina capa de café molido.
Alimentar a las lombrices del compost
Obtendremos un compost más rico si agregamos lombrices y, entre otros nutrientes, las alimentamos con los posos de café. Todos sabemos que las lombrices son bienvenidas en los jardines porque son realmente necesarias para trabajar la tierra. A las lombrices les gusta el café pero siempre y cuando haya poca cantidad, si te pasas de la raya las lombrices podrían morir porque no podrían digerir bien tanta acidez del café. No pongas más de una taza pequeña de café a la semana a la tierra de tu jardín, para que las lombrices sobrevivan no tengas tentación de echar más café a la tierra de tu jardín.
Como ves, el café es una bebida que a todo el mundo le gusta (o a casi todo el mundo) y que además, puede servirte para que tu jardín esté en mejores condiciones. Si tienes posos de café ya puedes reutilizarlos. A partir de ahora verás el jardín de diferente manera porque además de ser tu bebida preferida para afrontar el día, se convertirá también en tu elemento preferido y fácil de conseguir para cuidar a tu jardín.
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